Leemos -y escribimos- a veces noticias que nos hacen ver cómo los individuos “pierden” el tiempo en el trabajo usando las redes sociales con otros fines diferentes a los profesionales. Esto lleva a muchas empresas a prohibir su uso, algo quemuchos expertos consideran un importante error. Educar en su utilización y motivar al empleado a que las use aumentando su productividad laboral es uno de los retos más importantes de las compañías hoy día. La prohibición sólo genera malestar. Así lo ha anunciado recientemente Pablo Bermudez, que es experto en redes sociales de la escuela de postgrado de la Organización de Estados Americanos, quien ha realizado apreciaciones muy acertadas.
“Muchas empresas que utilizan redes sociales, prohíben su uso a los trabajadores dentro del negocio yeso es un gravísimo error, porque se rompe el nexo entre la propia creatividad y la posibilidad de plasmarla en las redes sociales”, aseguró el profesor. En este sentido, señaló que si el trabajador está involucrado con su empresa, va a usar cualquier herramienta que tenga a mano para lograr resultados, sea red social, móvil, correo electrónico… El problema viene cuando el empleado no se siente motivado o no está comprometido con su trabajo “Entonces va a perder el tiempo con estas herramientas o leyendo el diario”, reconoció el experto durante una conferencia realizada en la Universidad del Pacífico, en Perú, según recoge el diario La República.
No le falta razón. El reto para las compañías es motivar a sus empleados para que, además de usar las redes sociales en horario laboral –algo inevitable quizá en pequeñas dosis y en horarios de descanso, por ejemplo- lo hagan en beneficio de la propia compañía. Para ello deben sentirse implicados con los intereses corporativos e identificados con la empresa. Sólo así se logrará que el uso de las redes sociales en el trabajo redunde también en beneficios para la compañía.
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