La telefónica estadounidense AT&T, fuertemente criticada por la calidad pobre de su red celular, empezó a vender su primer teléfono multiuso con una infraestructura única de respaldo: una red de trasmisión satelital. El anuncio significa que los usuarios del nuevo aparato, el TerreStar Genus, podrán tener una cobertura total en Estados Unidos, aun si se encuentran en zonas despobladas, boscosas o desérticas o incluso cuando se encuentren a cientos de kilómetros mar adentro.
El nuevo teléfono se parece mucho a un BlackBerry, pero es un poco más grueso. No tiene una gran antena que sobresalga, como otros teléfonos satelitales.
Podría ser una herramienta importante para embarcaciones, pescadores, guardias forestales, equipos de emergencia y otras personas que suelen salir de las áreas de cobertura regular de la telefonía celular.
Sin embargo, el aparato tiene algunas restricciones. Para utilizar el teléfono, tiene que haber una visión clara del cielo hacia el hemisferio sur, por donde se desplaza el satélite. No debe haber árboles, edificios o montañas que obstaculicen la señal, lo que obliga al usuario a estar a la intemperie.
El satélite sólo apunta a Estados Unidos y no ofrece una cobertura global como la constelación de satélites de Iridium Communications Inc.
AT&T inicialmente venderá los teléfonos a sus clientes profesionales a través de canales comerciales, pero comenzará a distribuirlo en tiendas a finales de año, dijo Chris Hill, el vicepresidente de Soluciones Avanzadas en Telefonía Móvil de AT&T, con sede en Dallas.
El teléfono costará 799 dólares sin contrato a dos años, pero requerirá planes de servicio regular de voz y datos de AT&T. Empleará la red de AT&T cuando esté disponible.
La opción de poder cambiar a la red satelital cuesta 25 dólares adicionales por mes y luego 65 centavos de dólar por minuto de llamada.
El Genus, sin embargo, no estará limitado a las llamadas cuando el usuario trate de comunicarse: también será el primer teléfono satelital con funciones multiuso, pues ejecuta el software Windows Mobile 6.5 y cuenta con un teclado con alfabeto completo.
Podrá enviar y recibir datos a través del satélite, lo que significa que puede ser utilizado para correo electrónico y navegar por Internet, pero su costo, como el satélite, es muy alto: cinco dólares por megabyte: 400 veces más caro que un plan estándar terrestre de datos, de 25 dólares por mes.
Los mensajes de texto, en cambio, son una ganga: costarán 40 centavos cada uno, sólo cuatro veces más alto que el precio unitario que el de los de teléfonos celulares.
Los nuevos aparatos se comunicarán con el mayor satélite comercial del mundo, propiedad de TerreStar Corp.
El satélite fue lanzado al espacio el año pasado y desplegó una antena de paraguas con malla de oro de 18 metros (60 pies) de ancho, para recoger las débiles señales de los teléfonos ubicados a 35.400 kilómetros (22.000 millas) sobre la superficie terrestre.
Es demasiado costoso, tener mayor cobertura no debería significar el tener que pagar tanto, AT&T debería invertir en mejorar su infraestructura primero que todo