Un fiscal de Estados Unidos está investigando un acuerdo alcanzado por Amazon.com y Apple para ofrecer precios bajos por libros electrónicos, al señalar que el trato puede impedir que sus rivales ofrezcan un precio atractivo. Amazon y Apple elaboraron este año un acuerdo de “naciones más favorecidas” con las grandes casas editoriales que garantizaba que las librerías rivales no podrían conseguir precios más bajos, afirmó el fiscal general del estado de Connecticut, Richard Blumenthal. El fiscal citó a grandes editoriales como Macmillan, Simon & Schuster, Hachette, HarperCollins y Penguin.
Blumenthal ha enviado cartas a Amazon y Apple pidiendo reunirse con sus responsables para tratar el asunto.
“El mercado del libro electrónico está a punto de explotar y los analistas predicen que los lectores de libros electrónicos estarán entre los regalos tecnológicos más vendidos de la temporada navideña, lo que insta a una urgente revisión de los posibles impactos que perjudiquen a los consumidores”, indicó el fiscal en un comunicado.
“Esta restricción bloquea los precios más baratos y competitivos para los consumidores”, añadió.
Amazon y Apple compiten estrechamente en el mercado del libro electrónico, al igual que las cadenas de librerías estadounidenses Barnes & Noble y Borders Group.
Ni Amazon ni Apple estuvieron inmediatamente disponibles para hacer comentarios. No se pudo localizar a un representante de Penguin. Simon & Schuster y Harper Collins declinaron hacer comentarios.
El contenido digital es clave en la estrategia de los lectores electrónicos como el Kindle, de Amazon, o las tabletas como el iPad, de Apple (pequeñas computadoras de pantalla táctil, sin teclado ni ratón), que permiten leer en formato digital y que han disparado su popularidad.
Los precios de los libros electrónicos son mucho más bajos que los de tapa dura, y tanto Amazon como Apple ofrecen muchos éxitos de venta por 9.99 dólares, lo que ha causado el temor en la industria editorial a que sufra el mercado de la tapa dura.