Las Unidades de Almacenamiento en Estado Sólido por fin están en disposición de reemplazar de forma masiva a los antiguos Discos Duros. A continuación analizamos sus ventajas.
Durante varios años, la tecnología SSD (Solid State Drive), se ha mantenido en una especie de estado latente en el mercado, con un crecimiento relativamente pobre con respecto a las previsiones. Ha sido así debido a diversos factores como los elevados precios o una visible descompensación entre las tasas de lectura y de escritura. Siempre se ha hablado de que estas Unidades de Almacenamiento en Estado Sólido terminarían reemplazando a los actuales discos duros HDD, pero parecía que no iba a llegar ese momento.
La tecnología SSD tiene un brillante futuro en el segmento corporativo
Sin embargo, ahora parece que sí están en condiciones de hacerlo, toda vez que las tecnologías de fabricación ya se encuentran en un estado muy maduro y los precios de los dispositivos han caído considerablemente.
Estas son diez razones por las que las organizaciones deberían actualizar su parque informático para desplegar en sus equipos unidades SSD.
1. No tienen partes móviles. Nada se puede romper con el uso, o al menos no será habitual en comparación a cualquier otro dispositivo dispositivo de almacenamiento HDD.
2. Mejores tasas de lectura/escritura. La información almacenada en un SSD está disponible en cualquier momento, no necesita que nada gire hasta acceder al sector concreto, sino que se accede directamente al bit solicitado. Esta es la segunda razón clave por la que esta tecnología representa el futuro.
3. Más resistentes. En caso de golpes o caídas de una de estas unidades, las posibilidades de que siga funcionando sin problemas son mucho mayores que con la tecnología HDD.
4. Más posibilidades de integración. Los distintos tamaños disponibles, más reducidos que las unidades tradicionales HDD, permiten a los discos SSD ser utilizados en un mayor número de dispositivos.
5. Capacidades cada vez mayores. La continua evolución de la memoria NAND Flash permite fabricar unidades de mayor capacidad, duplicándose por regla general cada año. Al contrario que las unidades HDD, no existen límites físicos para seguir creciendo en este sentido.
6. Menor consumo energético. La ausencia de partes móviles significa también que el consumo eléctrico es mucho menor y en este sentido se está mejorando para conseguir unidades de ultra-bajo voltaje.
7. Menor refrigeración. Otra de las características que se extraen es que las unidades SSD no necesitan tanta refrigeración para un correcto funcionamiento.
8. La fiabilidad ha mejorado. Tanto la durabilidad como las características de balanceo de carga, especialmente en unidades diseñadas para el segmento corporativo, han mejorado drásticamente en los últimos años.
9. Huella de carbono reducida. Cuanto menor es la acción mecánica, menos calor y CO2 se genera.
10. Los precios siguen bajando. Aunque la reducción de precios ha sido lenta, seguirán bajando mientras se produce su adopción en el mercado.