HP, tras los planes relativos a la escisión del equipo de WebOS, tiene en su agenda deshacerse de Palm lo antes posible y, según fuentes cercanas a HP (de las que no se revela ningún dato más), Amazon podría estar a punto de cerrar la compra, algo que encajaría perfectamente con la situación del antiguo CEO de Palm, Jon Rubinstein, que ahora trabaja en la división de sistemas personales (el lastre de HP) y que, además, se unió al Consejo de Administración de Amazon a finales del año pasado.
Ni HP ni Amazon, por ahora, ni confirman ni desmienten estos rumores pero, realmente, esta adquisición podría tener mucho sentido. El Kindle Fire, aparentemente, utiliza Android pero lo han personalizado tanto que, al final, cuesta reconocerlo y, precisamente, ahí estaría la clave de esta operación. Si Amazon se quedase con Palm (y, por tanto, con WebOS), la compañía contaría con una plataforma propia y tendría total libertad para personalizarla y adaptarla a sus líneas de negocio. Amazon cuenta con una serie de factores que pueden hacer que esta operación sea un éxito porque controlan una cadena de valor con mucho potencial (tienda de aplicaciones, distribución de contenidos, etc) y que, sumadas a su constante evolución y adaptación del negocio, podrían hacer que Palm funcionase como nunca lo ha podido hacer con HP.
Plataforma propia, dispositivos propios a precios muy competitivos y plataforma sobre la que ofrecer contenidos, una estrategia de negocio 360º que podría colocar a Amazon en una posición muy interesante en el sector de la movilidad si, realmente, culminase la operación con éxito.
Lógicamente, no creo que Amazon llegue a pagar los 1.200 millones de dólares que pagó HP por Palm, seguramente, le salga mucho más barato, así que la rentabilidad incluso podría venir a menor plazo, lo cual mejora mucho más las perspectivas.