Según un estudio realizado por el American Affluence Research Center, el 61% de los 22 millones de personas más ricas de los Estados Unidos posee un teléfono inteligente, lo que significa que aún hay un mercado potencial sin explotar donde pueden tener cabida cerca de ocho millones de teléfonos inteligentes; o lo que es lo mismo, quedan como potenciales clientes el 39% de las personas adineradas.
Los resultados de la encuesta indican que el 22% de las personas ricas de ese país posee una tablet, lo que significa que hay un mercado sin explotar, compuesto por el 78% de quienes un poder adquisitivo muy alto.
Según Ron Kurt, director del centro donde se ha llevado a cabo el estudio: “Hay mucho que hablar de penetración de dispositivos móviles y hay que averiguar quién los tiene y qué uso se les da, para que la gente llegue al mercado de manera efectiva”. En este mismo sentido, Kurt señala que “es importante saber a través de qué plataforma deben comunicarse los comerciantes para que sea más conveniente y fácil acceder a la información de la marca y utilizarla a través de una aplicación”.
En el estudio también se analizan las edades y las características demográficas de las personas, junto con los tipos de dispositivos que utilizan. Aunque sólo el 61% de este grupo de personas posee una tablet o un teléfono inteligente, alrededor del 65% de los ricos tienen acceso a teléfonos inteligentes o tabletas.
Un 84% de las personas con muy alto poder adquisitivos menores de 50 años posee un teléfono inteligente, mientras que sólo el 38% de las que tienen entre 50 y 60 posee uno.
Donde no se ven muchas diferencias es en el sexo de las personas que se decantan por uno u otro dispositivo. Lo que sí es evidente es que cuatro de cada cinco personas prefieren la tableta IPAD sobre las demás.
El estudio también demuestra una correlación entre los ingresos y el tipo de teléfono inteligente. Las personas que ganan más de 200.000 dólares al año tienen el doble de probabilidades de tener un teléfono inteligente y se decantan más por BlackBerry. Asimismo, aquellos con unos ingresos ligeramente inferiores, menos de 200.000 dólares por año, prefieren el iPhone.