Según un reciente estudio del grupo NPD, los usuarios de iPhone o de un smartphone con Android tienen algo en común: su preocupación por la seguridad de sus móviles. Y no me refiero al tema de que se los puedan robar físicamente, sino al aspecto de que les puedan robar información sobre sus tarjetas de crédito, sufrir ataques de hackers que pongan en riesgo la funcionalidad de sus equipos, etc.
El estudio también demostró que el 25% de los dueños de un smartphone y el 35% de los dueños de un iPhone, no saben qué hacer para asegurar sus móviles, a fin de impedir ser víctimas de un ataque. Y en el caso de aquellos que sí saben qué hacer para poner sus dispositivos a mayor resguardo, el 25% admitió que no instala un producto de seguridad, debido a que el precio a pagar por ese software es demasiado caro.
Esta dejadez de parte de los usuarios de un smartphone en el tema de la seguridad se puede explicar por el hecho de que las amenazas no son muy grandes, por el momento. Pero mientras los hackers vayan poniendo la mira cada vez más en los móviles, entonces la preocupación y las medidas por la seguridad a adoptar serán mayores por parte de los usuarios. Solo esperemos que no sea demasiado tarde.