El terremoto causó la interrupción masiva de la red telefónica del país, principalmente por los daños a la infraestructura y sobrecargas. Estas últimas han disminuido, pero aún hay que realizar un montón de trabajo para que las estaciones base sean reparadas o reemplazadas a todo lo largo del área afectada.
NTT DoCoMo, el mayor operador celular de Japón, dijo que dos terceras partes de sus 10,000 estaciones base en el norte de Japón estaban fuera de servicio inmediatamente después del terremoto, aunque la red se ha recuperado rápidamente. A la 1 pm del pasado jueves, la compañía aún tenía 810 estaciones base fuera de combate, dijo Naoko Minobe, un portavoz de la compañía.
La recuperación en algunas zonas podría tomar varios meses. Mientras tanto, cuenta con 30 estaciones base de telefonía móvil en la región que sirve pueblos que de otra manera no tienen servicio, pero las estaciones base sólo llegan a unos pocos cientos de metros. Más allá de eso, muchas áreas permanecen sin servicio de telefonía celular de la compañía u otros operadores de telefonía móvil de Japón.
Inmediatamente después del terremoto, el tráfico celular se disparó y las compañías impusieron restricciones a través del este de Japón, incluyendo a Tokio. En un momento, NTT DoCoMo sólo lograba conectar una de cada diez llamadas de teléfonos móviles, pero las restricciones se levantaron un día después del terremoto. Un aumento de las llamadas sigue siendo visto después de la ocurrencia de fuertes réplicas y las restricciones a veces se han reintroducido para evitar obstrucciones en la red.
NTT East, la compañía de telefonía fija para la región, perdió 1,5 millones de líneas de teléfono, ISDN y fibra óptica de Internet cuando se produjo el terremoto. Se han restaurado muchas, pero 155.000 líneas permanecen sin servicio debido a las centrales telefónicas estean muy dañadas o han perdido su conexión con la red principal de NTT.
Para ayudar a las personas mantenerse en contacto, NTT ofrece llamadas gratuitas desde cualquier teléfono público en seis prefecturas afectadas por el terremoto en el norte de Japón. Asimismo, ha instalado 2.076 teléfonos públicos adicionales en 615 localidades.