Seguimos con las novedades que Microsoft nos va enseñando sobre Windows 8. Esta vez nos han mostrado la velocidad de arranque que tendrá Windows 8. La nueva versión del sistema operativo va a cambiar nuestra forma de ver la hibernación, ya que podemos ver como un portátil con Windows 8, arranca hasta una interfaz Metro en sólo ocho segundos.
Al apagar el ordenador Windows 8 cerrará nuestra sesión de usuario, pero hibernará lasesión del núcleo del sistema. Una hibernación sólo del núcleo implica escribir muchos menos datos en disco, lo cual permite mucha más rapidez. Además, el proceso de arranque de Windows 8 aprovechará todos los núcleos de la CPU multiplicando su rendimiento.
De hecho el arranque es tan rápido que no hay ni siquiera una pantalla de arranque, saltamos directamente a la interfaz en “celdas” de Windows 8. Y lo mejor de todo es que este arranque estará presente tanto en ordenadores con discos duros tradicionales como en máquinas más modernas con discos SSD integrados.
Por cierto, algo interesante acerca del arranque de Windows 8 es que podría hacer uso de una EFI despidiéndose así de la tradicional BIOS, otro paso adelante para dejar atrás tecnologías que ya tienen una edad.