Los usuarios de smartphones suelen guardar su información más personal en la agenda de sus telefónos móviles. Números de teléfono, direcciones de correo, cumpleaños, reuniones, citas…
Toda una vida guardada en un móvil y una información a la que, según desvela el New York Times, cualquier desarrollador puede acceder cuando estime oportuno, habitualmente sin conocimiento del usuario, lo que les ayudaría a conocer rápidamente la red de personas que utilizan sus programas.
Esta práctica salió a la luz después de que la semana pasada un desarrollador descubriera que la aplicación de la red social Path -solo está disponible para móviles- almacenaba sin pedir permiso los nombres de los contactos del usuario y sus números de teléfono en sus servidores.
A raíz de la noticia, la compañía pidió perdón y aseguraron que a partir de ahora dejarán de recopilar la información y se comprometen a destruir todos los datos que habían obtenido.
Pero Path solo fue la punta del iceberg. En los días sucesivos, distintos blogueros descubrieron que otras aplicaciones, desarrolladas tanto para Apple como Android, entre las que figuran algunas tan populares como Facebook, Twitter, Foursquare o Instagram, y otras menos conocidas en España como FoodSpotting, Yelp o Gowalla, recopilaban igualmente los datos del usuarios, la mayoría de las veces sin su permiso.
En el caso de Twitter, hasta ahora, la compañía almacenaba los datos de la agenda del usuario durante 18 meses. No obstante, un portavoz de la red social ha reconocido que en los próximos días actualizarán la aplicación para evitarlo ya que quieren “ser claros y transparentes en la relación con los usuarios”, en declaraciones recogidas por Los Angeles Times.
Y como Twitter, se prevé que en las próximas semanas muchas compañías actualicen sus aplicaciones para poner fin a estas prácticas que han sido incluso denunciadas en el Congreso de Estados Unidos.
Apple pedirá la “aprobación explícita”
Bajo la presión de los legisladores de Estados Unidos, Apple ha querido sofocar la reciente polémica sobre la privacidad en sus dispositivos, y ha declarado que va a empezar a exigir que las aplicaciones para el iPhone y el iPad cuenten con la “aprobación explícita” del usuario antes de acceder a los datos de su libreta de direcciones.
La maniobra de Apple se produce poco después de que las autoridades estadounidenses solicitaran a la compañía que ofrecieran más información acerca de sus políticas de privacidad.
Las aplicaciones para iPhone y iPad tendrán que tener la aprobación explícita del usuario
Durante los últimos días, los blogueros han publicado hallazgos de que algunas de las aplicaciones de software más populares de App Store también ha accedido a los datos privados de los usuarios sin su consentimiento.
Un portavoz de la compañía, citado por Reuters, reconoce que “as aplicaciones que recogen o transmiten datos de contacto de un usuario sin su permiso previo constituyen una violación” de sus normas.
De todas formas, justifica que esta medida es para mejorar la experiencia de uso de los clientes, pero que como han hecho con los servicios de geolocalización, a partir de ahora, “cualquier aplicación que quiera acceder a los datos del usuarios necesitará la aprobación explícita del usuario”.