La pequeña compañía china Proview Electronics pretende hacer caja mediante la intensificación de la demanda judicial contra Apple, por el uso del nombre iPad en los tablets de Cupertino.
“Nos hemos preparado bien para una batalla legal a largo plazo”, amenazan desde Proview Electronics, una pequeña compañía con sede en Hong Kong que tiene registrado la marca iPad y cuyo derecho de uso vendió a Apple, pero excluyendo el territorio chino.
Apple, sin embargo, comenzó a vender el iPad en el gigante asiático igual que lo hace en el resto del mundo, por lo que fue demandado y condenado a finales de año. La sentencia está en suspenso por la apelación de Apple aunque las últimas informaciones hablan de no estimación y de multa para Apple por infracción de marca.
Además, la indemnización que pide Proview Electronics se las trae: 1.600 millones de dólares. Una cifra que a buen seguro será rebajada aunque Apple tendrá que sacar la chequera en último extremo si quiere utilizar en el mercado más grande del mundo, el nombre de marca que ha conseguido convertirse por sí sola en categoría de producto.