Apple ha presentado sus resultados financieros para el tercer trimestre del año. La compañía ha cerrado el trimestre con unas ventas netas de 35.023 millones de dólares (un poco más de los 28.571 millones de dólares que consiguió en el mismo período del año precedente).
La firma se situó ligeramente por debajo de las previsiones de los analistas: el retraso en la llegada de la nueva versión del iPhone está haciendo que se vendan menos productos de los esperados (los compradores se mantienen a la espera del próximo modelo, el iPhone 5) y la situación económica europea está haciendo que las ventas en el continente sean también un poco más débiles, como los directivos de la empresa confirmaban en la conferencia con analistas e inversores posterior a la publicación de resultados.
Apple ha cerrado con un beneficio operativo de 11.573 millones de dólares, por encima de los 9.379 millones del mismo trimestre del año precedente, y con un beneficio neto de 8.824 millones de dólares, frente a los 7.308 conseguidos en el tercer trimestre del año fiscal 2011. La firma ha prometido un dividendo a inversores de 2,65 dólares por acción, que se pagará el próximo 16 de agosto.
“Vamos a seguir invirtiendo en el crecimiento de nuestro negocio y nos satisface repartir hoy un dividendo de 2,65 dólares por acción”, ha señalado Peter Oppenheimer, director financiero de Apple, en un comunicado a los medios. “Para el cuarto trimestre del año fiscal esperamos ventas de aproximadamente 34.000 millones de dólares y un beneficio diluido próximo a los 7,65 dólares por acción”, añade.
Apple ha aprovechado la cita con los mercados para actualizar las cifras de ventas de sus productos. La firma ha vendido 26 millones de iPhones durante el tercer trimestre de 2012, 17 millones de iPads (un 84% más que en el mismo trimestre del año precedente, claramente fruto del lanzamiento del Nuevo iPad), 4 millones de ordenadores Mac y 6,8 millones de iPods.