

Beyoncé todavía no ha hecho ninguna declaración al respecto, pero sus representantes legales afirman que la cantante tenía la posibilidad de reconsiderar las condiciones del contrato. Asimismo, añaden que Beyoncé decidió no participar en este proyecto cuando constató que la empresa no disponía de los recursos suficientes para garantizar la calidad de un producto que llevaría su imagen.
No obstante, el diario The New York Post ha publicado que la demanda se ha admitido a trámite, ya que la cantante debería haber comunicado su decisión a la empresa con mucho más tiempo de antelación.