Las firmas de seguridad informática son más conocidas por el misterioso pasado de sus fundadores, el origen hacker de sus trabajadores o su indefensión ante los ataques, que por la fiabilidad de sus antivirus.
El mundo de la seguridad informática siempre ha estado impregnado de un halo de misterio, posiblemente, algo exagerado. A ello han colaborado algunos de sus protagonistas más famosos.
El último, John McAfee, fundador de la popular firma de antivirus que lleva su apellido, quien, a sus 67 años, permanece en paradero desconocido tras haber sido acusado de matar a tiros a un vecino para solucionar una trifulca iniciada por sus respectivos perros. Sin duda, un triste colofón para un hombre que se marchó a vivir a la isla de Belice en 2009, después de agotar la incalculable fortuna obtenida tras la venta de sus acciones en McAfee.
Meses atrás, otro destacado personaje del mundo de la seguridad informática, Eugene Kaspersky, había visto cómo una improvisada banda de delincuentes -integrada por dos ancianos, su hijo y un amigo de éste- secuestraba a su primogénito, Ivan Kaspersky.
Días después, el joven era liberado por el Servicio Federal de Seguridad ruso, heredero de la KGB, en la que, dicen, se forjó el fundador de Kaspersky Lab en el mundo de los virus informáticos. De hecho, siempre se ha vinculado a Eugene Kaspersky con el presidente ruso, Vladimir Putin, ex dirigente del servicio secreto soviético.
Sea como fuere, no todos los creadores de antivirus acostumbran a disparar a sus vecinos o tienen vinculaciones con el mundo del espionaje. Tal y como explica Chema Alonso, autor de Un informático en el lado del mal, miembro de Informática64 y director del Master de Seguridad de Información de la Universidad Europea de Madrid, “hay muchas personas trabajando en el mundo de la seguridad informática de los que no hay tanta leyenda”.
Sí que es cierto, añade, “que los que luchan contra el mundo del cibercrimen y el fraude online suelen estar sometidos a mucha presión de grupos mafiosos que, evidentemente, no debe ser fácil para nadie y deben ser de otra pasta”. Para profundizar en este asunto, Alonso recomienda la lectura de ‘Fraude online. Abierto 24 horas’.
La oscuridad que siempre ha rodeado a personajes como Kaspersky también ha popularizado la idea de que las firmas de seguridad informática están detrás de buena parte de los virus que circulan por la Red. “Es unaleyenda urbana que si fue real en algún momento, fue hace muchos, muchos, muchos años, debido a que el volumen de malware que hay hoy en día no permite que pierdan tiempo en esas cosas”, opina Alonso.
En la misma línea, Paula Quirós, directora de Marketing y Comunicación de Panda Security, recuerda que las firmas de seguridad lidian con “73.000 ejemplares nuevos al día” y su base de datos de amenazas conocidas “ya supera los 68 millones”, de las que “el 54% solo viven 24 horas” y el 95% solo actúan durante tres meses, para luego desaparecer. Por todo ello, añade Quirós, “no es necesario que las empresas de seguridad contribuyamos a la creación, de malware, los ciberdelincuentescumplen de sobra”.