El informe de Kaspersky Lab sobre el estado del malware móvil en el tercer trimestre del 2012 vuelve a señalar aAndroid como la plataforma de elección de los cibercriminales del sector. Lo curioso, si se puede denominar en esos términos, es que no son las últimas versiones de Android las más afectadas -que también-, sino Gingerbread, lanzada en septiembre de 2011.
Es curioso, pero también lógico, ya que Android 2.3, con nombre en clave Gingerbread, es la versión que utilizan el 55% de todos los dispositivos Android, y la que recibe el 28% de los ataques -en concreto su versión 2.3.6. A la zaga le sigue Android 4.0 Ice Cream Sanswich y actualizaciones menores.
Un dato que se destaca es el de las aplicaciones y páginas web fraudulentas como origen de casi todos los males. En el primer caso las culpas recaen sobre las tiendas de aplicaciones alternativas a Google Play, pues aunque las hay fidedignas, la hay que no. En algunas se han detectado incluso versiones de Opera Mini fraudulentas, que solo buscan infectar al despistado que las instale.
En cuanto a los principales ataques, son los troyanos SMS, que se dedican a enviar mensajes de pago para sacar dinero rápido e irrecuperable.