En Japón han estado trabajando en el desarrollo de un virus policial que pueda ser efectivo contra los malware que acechan en el ciberespacio. Y ese trabajo, que se venía realizando desde el año 2008, parece que por fin ha llegado a su fin. Según lo que informa el diario japonés Yomiuri Shimbun, el Ministerio de Defensa de Japón le confió este proyecto a la empresa Fujitsu, al entregarle 178,5 millones de yenes ministerio de Defensa japonés a la empresa privada Fujitsu, por 178,5 millones de yenes.
El diario explica que una de las funciones principales del virus policial es lograr inmiscuirse hasta la fuente misma de donde proviene el malware, las computadoras que lo originan y saber cuál es la red que fue contagiada con ese virus informático. El virus policial, además, puede desactivar los ataques.
En las pruebas que se han realizado hasta ahora, se pudo confirmar su utilidad y se compiló datos sobre los patrones que que se reiteraban en los ataques.
Motohiro Tsuchiya, profesor de la Universidad de Keio y miembro de un panel de seguridad de información policial del gobierno, comentó que Japón debería incrementar “el desarrollo de armas anti-ciberataques”, reconsiderando la definición de armas legales que otros países tienen y que anteriormente han lanzado proyectos similares. Sin embargo, Graham Cluley, consultor senior de tecnología en Sophos, considera que este virus policial no es una buena idea, ya que las armas cibernéticas utilizan recursos como espacio en el disco duro, memoria y demás, que podrían causar efectos colaterales imprevistos.