No preguntes porqué alguien pagará 2.300 dólares por un tablet de 10 pulgadas con especificaciones mediocres. Porque puede y porque hará juego con su flamante Lamborghini.
Si los deportivos italianos bajo la marca sí son espectaculares, el tablet Lamborghini L2800 deja bastante que desear, con un procesador Snapdragon viejete, una resolución discreta para su tamaño, poco almacenamiento (4 GB) y al que ni siquiera han actualizado a ICS vendiéndolo con Android 2.3.
Un ‘cristal de zafiro’ que protege de arañazos y un par de altavoces traseros de grandes dimensiones son los únicos componentes destacados.
Y sí, también la marca Lamborghini por todos los lados y un estuche tipo diamante comprado en Tiffany. A la venta primero en Rusia y después en el resto del mundo por 2.300 dólares.