Los dueños de los cines de medio mundo sonríen tras el primer fin de semana con Kim Schmitz fuera de juego. Los resultados de recaudación, recién horneados, y aún provisionales, son sobresalientes tanto en Estados Unidos como en España, gracias al cierre de Megaupload.
En Estados Unidos, ya hay datos precisos sobre el fin de semana: en resumen, 136 millones de dólares en las taquilas, lo que representa uun 32% más que lo recaudado en el tercer fin de semana del año. En el conjunto de los primeros 22 días del año, los cines estadounidenses han incrementado sus ventas en un 10% respecto al curso pasado.
Y eso, que el fin de semana no traía grandes platos fuertes comerciales a las carteleras: el regreso de una saga ‘de segunda fila’ (‘Underworld awakening’, que ha facturado 25,4 ‘kilos’) y la adaptación de una novela de Jonathan Safran Foer (‘Extremely loud & incredibly close’) eran lo más destacado de un fin de semana sin ‘blockbusters’.
¿Y en España? Las páginas de internet que suelen hacer públicos los resultados de las taquillas aún no han hecho el balance del fin de semana, pero ya hay resultados parciales muy buenos. Por ejemplo, el de ‘Los descendientes’, a la que la web de referencia, boxoffice.es pronosticaba una recaudación de 600.000 euros, si las cosas le iban bien, ha ingresado 2,3 milllones de euros en las taquillas. Más, por ejemplo, de lo que logró hace un año ‘Cisne negro’ con un aparato promocional mucho más grande.
En el caso de Europa, el impacto del cierre de Megaupload puede ser aún mayor, ya que los videoclubs en ‘streaming’ no tienen la implantación de servicios como el de Netflix en Estados Unidos. Juan Carlos Tous, representante de Filmin, la web con más peso en ese mercado en España, calcula que su tráfico “se ha duplicado, casi triplicado”, respecto a fines de semana anteriores, después de lanzar una campaña de promoción relámpago tras la detención de Schmitz. “Lo que ha ocurrido no quiere decir que se haya acabado la competencia de las descargas ilegales, pero sí que creemos que este mercado se va a normalizar, porque, de lo contrario, se acababa el cine”. “Los datos”, según Tous, “demuestran que la gente quiere ver películas y que está dispuesta a pagar un precio justo por ellas”.
¿Cómo interpretar estos resultados? ¿Es pronto para hacer tendencia? “Estamos ante un éxito momentáneo por el miedo del resto [de servidores de descarga], que están borrando archivos a toda velocidad. Eso era previsible. Hasta que la gente vaya usando otras alternativas (actuales o venideras). Hay quien ya se ha ha vuelto a instalar el emule (sistema en el que no hay beneficio económico de ningún señor gordo y que no se puede cerrar). Supongo que habrá una nueva caída de ventas a final de año, esa es una inercia imparable”, explicaba esta mañana un profesional experto en el consumo de cultura en internet.
“El problema eterno de la industria es que se cree que cerrando se arregla el problema, cuando solo es una cuestión de falta de alternativas similares a precios razonables. Lo de Filmin está bien, pero todavía no llega a cubrir la demanda. El futuro (muy lejano) viene con estrenos ‘online’ a la vez que en el cine. A 2-3-4 euros porque, evidentemente, si te toca poner la casa y el ordenador no pueden cobrar a 8 euros”.