Fue un 12 de agosto de 1981, hace 32 años, cuando IBM logró una de las mayores hazañas de la era de la computación, con la comercialización del Computador Personal (PC). En este momento, la computación comienza a abandonar ese estigma de “ciencia oculta” para volverse algo cotidiano y muy útil.
Aunque a primeros de los 80’s ya existían buenas computadoras personales como Apple II o Commodore PET, fue IBM quien estableció un estándar de hardware y software con su PC y el sistema operativo de una desconocida Microsoft (PC-DOS o MS-DOS).
No obstante, ese día de agosto, ni los profetas más arriesgados imaginaban que la revolución iniciada con el PC alcanzaría a todos y cada uno de los habitantes de los países desarrollados, sin excepción. El fuerte arraigo del PC en el mercado supuso el abandono de las investigaciones de muchas empresas en otras tecnologías como es el caso de los computadores trinarios. Nada podría ya desbancar al PC.
El comienzo del cambio
El comienzo de esta revolucionaria idea nos lleva a finales del Siglo XIX, cuando en plena revolución industrial, EEUU recibía a diario miles de inmigrantes que buscaban fortuna en el nuevo continente.
Ante el colapso de las oficinas del censo, las autorirades no tuvieron más remedio que convocar un concurso público para mejorar el sistema existente. Precisamente un inmigrante alemán llamado Herman Hollerith, que era empleado del censo en Nueva York, desarrollo una máquina perforadora que bautizo como “Punch Card Tabulating Machine”.
Este invento fue un gran éxito e hizo que Hollerith ganara el concurso. Todo ello llevó al alemán a crear su propia empresa que llamó “Tabulating Machine” y durante más de 10 años se dedico a fabricar máquinas perforadoras con mucho éxito.
Pero no fue hasta 1911 cuando Charles R. Flint gestionó la fusión de esta empresa con dos más del sector (Computing Scale e International Time Recording). El resultado fue Computing-Recording Company (C-T-R), una empresa de unos 1300 empleados que se dedicaba a fabricar todo tipo de maquinaria: balanzas industriales, cronómetros y hasta cortadores de carne o queso.
A los pocos años la economía de esta empresa empezó a tambalearse. Entonces tomo sus riendas, Thomas J. Watson (para algunos el auténtico fundador de IBM). Watson consiguió elevar C-T-R a la cumbre, además de extenderla por todo el mundo, y en 1924 le cambió el nombre a International Bussines Machines (IBM).
PC que hizo historia
En julio de 1980 IBM comenzó a desarrollar su primera computadora personal pretendiendo así irrumpir en todos los hogares. La primera y más importante decisión que adoptó la comisión de este proyecto fue que su PC debería basarse en una arquitectura abierta, seleccionando los mejores componentes y software de las mejores empresas.
Esta política fue la clave del éxito del IBM PC y lo que más tarde haría que se convirtiera en un estándar. Si no lo hubieran decidido así, seguramente el IBM-PC sería un ordenador personal más, añadidos a la lista de los ya comercializados Apple II, Commodore PET, etc. IBM era consciente de que si quería que su trabajo tuviera éxito debería aportar algo más que sus competidores en ordenadores personales, ya que estos le llevaban una ventaja muy considerable.
Vale recordar que la primera microcomputadora de la historia la fabricó Micro Instrumentation Telemetry Systems en 1975 con el nombre de Altair 8800. Es por ello la decisión de fabricar su PC a golpe de talonario, comprando todo el trabajo que le llevaban de ventaja sus competidores. Esto era un lujo que una empresa de la envergadura de IBM se podía permitir.
Un mes más tarde, comienza el desarrollo del primer prototipo apodado con el nombre de batalla de “ACORN”.
“En septiembre de 1980 en Boca Raton (Florida, Estados Unidos), un equipo de 12 especialistas recibieron el encargo de desarrollar en un año ‘una máquina que la gente deseara tener’. En ese equipo se encontraban los doctores David J. Bradley y Mark Dean.” Esta es la versión oficial de IBM pero lo cierto es que el IBM PC no se desarrollo en ningún laboratorio, sino que sería diseñado en los despachos de los directores de las empresas más importantes de EEUU.
La primera parte del desarrollo del IBM-PC se basó en la elección de los componentes y el tipo de arquitectura. La elección del microprocesador la tuvieron muy clara desde el principio, ya que la empresa Intel era líder en el desarrollo de estos chips.
Escogieron el Intel 8088 con un bus de 8 bits fabricado en 1978. Se rumora que el gran éxito del microprocesador antecesor al 8088, el Intel 8086 (además de las vertiginosas ventas del Apple II) fue la motivación que provocó la incursión de IBM en el mercado de los computadores de hogar.
Pero el verdadero problema de IBM era la elección del alma de su PC: el sistema operativo. El equipo de IBM era consciente de que el éxito o el fracaso de su PC se basaría fundamentalmente en su sistema operativo. El más adecuado era el CP/M, un sistema que ya había sido utilizado en otras microcomputadoras basadas en chips de Intel. El CP/M, desarrollado por Digital Research, empresa familiar a cargo de Gary Kildall y su mujer, era un sistema operativo de 8 bits consolidado en el mercado de los PC’s, además estaba a punto de ver la luz la versión de 16 bits.
Esta versión era ideal para el IBM-PC. Curiosamente IBM pensaba que el CP/M era obra de la recién nacida Microsoft de un desconocido Bill Gates. Hacia Washington se dirigió un equipo de IBM, chequera en mano, dispuesto a traerse bajo el brazo el CP/M. Para sorpresa de todos, Gates les contó que CP/M pertenecía a Digital Research. Este desliz de IBM, le permitió a Gates tomar posiciones.
La astucia de Gates, ayudada por el patinazo de IBM en su anterior visita, le dio el tiempo suficiente para buscar el sistema operativo de 16 bits que sus clientes iban buscando: ni más ni menos que el QDOS de Tim Paterson, distribuido por la Seatle Computer Products y un tremendo fracaso comercial. Microsoft le compró todos los derechos de explotación del QDOS a Tim Paterson por $50.000, mucho más de lo que éste podría haber sacado vendiéndolo por su cuenta.
El equipo de IBM quedó maravillado por el flamante QDOS de Bill, rebautizado como MS-DOS. Más tarde Microsoft contrataría a Paterson para desarrollar las posteriores versiones de MS-DOS.
Finalmente, tras 11 meses de abrir y cerrar puertas, el 12 de agosto de 1981 IBM lanzó exitosamente su “flamante” IBM PC. Poseía un microprocesador Intel 8088, 16k de RAM, ampliables a 256k, una unidad de diskettes de 160k, un monitor de pantalla verde monocromática y equipado con el MS-DOS rebautizado como PC-DOS. Su precio inicial fue de $3.285.