Los dispositivos móviles de última generación no solo sirven como aparatos para comunicarse o entretenerse. Conectados a internet y con altas prestaciones, cada vez más se van haciendo un hueco en la vida diaria de las personas, desde aplicaciones en la enseñanza hasta métodos de apoyo en operaciones quirúrgicas.
Las Google Glass, las gafas de realidad aumentada que están llamadas a revolucionar la forma en la que el usuario interactúa con su móvil y con lo que le rodea, entraron por primera vez a un quirófano. A ellas, se suma otro dispositivos que no nació para tal fin pero que se le está encontrando un particular uso en el ámbito de la salud.
Una «tablet» ha servido de apoyo para una de las primeras cirugías de hígado. El profesor Karl Oldhafer, médico jefe de cirugía general en el Hospital Asklepios de Hamburgo-Barmbek, y su equipo se han servido de este aparato, que utiliza la realidad aumentada, para visualizar el órgano a través de un iPad mientras se superponen modelos virtuales en 3D del órgano reconstruido, ha informado Reuters.
Desarrollado por Fraunhofer MEVIS de Bremen, este procedimiento ayuda a localizar las estructuras críticas tales como tumores y vasos, y se espera que mejore la calidad de las resecciónes preoperacionales en cirugía real.