[Berlín] Este año los tecnodomésticos de IFA nos han traido algunas ideas un tanto peregrinas como el frigorífico Haier NOSE (nose=nariz en inglés). Básicamente esta nevera hace lo que todas, enfriar. Pero en una feria donde la nevera más tonta hace cubitos de hielo hace falta destacar con algo y Haier le ha puesto una nariz electrónica a un compartimento de esta nevera. Objetivo: detectar los alimentos que esten en mal estado y avisar al propietario mediante una alarma en el móvil o tablet.
Con esta futurista nariz electrónica la nevera detecta el olor que desprenden los alimentos que previamente han sido registrados en el sistema. Gracias a ello también sabe el tiempo que cada producto lleva en la nevera (salvo que alguien se lo coma sin avisar).
La mala noticia no es su precio, que aún no está definido pero seguro que no será barato. La mala noticia es que aún no existe, ya que lo que vimos en IFA era un prototipo no plenamente funcional. Vamos, que en el fondo apenas tenian poco más que la idea, una app que simulaba el funcionamiento y un poco de bricolage geek. Pese a ello la idea no solo no es ninguna locura, sino que apostamos a que veremos algo parecido en las neveras de otras marcas en no demasiado tiempo.