La llegada de pantallas curvadas al mercado de la telefonía móvil de masas es casi una realidad. Lo cierto es que las pantallas curvadas, con toda probabilidad son flexibles. No obstante, esto no significa que podremos doblar nuestras pantallas debido a que pese a que las pantallas curvadas son flexibles, el resto de los componentes son rígidos. Sobre si se aplicará esta tecnología en futuros smartphones en los que sí se podría doblar la pantalla, el mercado lo dirá, aunque en principio parece algo más llamativo que útil.
Sobre si tienen sentido o no las pantallas curvadas, muchos serán los que alcen el grito y digan que es inútil incorporar una pantalla flexible en un smartphone rígido, aunque lo cierto es que este nuevo tipo de pantallas cobran mucho más sentido en un smartphone o dispositivo móvil que en cualquier otro dispositivo. He aquí unos cuantos motivos por los que las pantallas curvadas son más que útiles y harán que llores por un dispositivo que incorpore una:
- Son mucho más resistentes: Al ser flexibles, si tu smartphone cae, la pantalla absorberá el golpe y lo distribuirá, siendo mucho más difícil romperla. Probablemente no estemos ante el fin de las pantallas rotas, pero se dice de las pantallas curvadas que son mucho más resistentes que la tecnología actual.
- Son mucho más delgadas: ¿Y en qué se traduce eso? En más espacio para la batería o en la posibilidad de reducir todavía más el grosor de los dispositivos. Las pantallas curvadas son mucho más finas que las actuales y puede que traigan consigo la instauración de la autonomía de 2 días como regla a nuestros dispositivos.
- Ofrecen muchos retos en el campo del diseño: Estamos ante una tecnología relativamente nueva, que todavía no ha llegado al mercado y que no sabemos hacia dónde evolucionará. Pero lo cierto es que las pantallas curvadas abren la puerta a muchas posibilidades a la hora de diseñar dispositivos. Quizás estemos ante el fin de las pantallas planas en nuestros dispositivos.
Tan pronto como la semana que viene podríamos ver apuestas en esta materia por parte de dos gigantes: LG y Samsung, ambos surcoreanos y ambos centrados en llevar las pantallas curvadas a dispositivos móviles.