El gigante chino del comercio electrónico Alibaba, que en septiembre protagonizó en Wall Street la mayor salida a bolsa de la historia, dedicó desde 2013 a noviembre pasado unos 160 millones de dólares (130 millones de euros) a evitar que se vendan productos falsos a través de sus portales. En un comunicado, la firma explica que su control de los flujos masivos de datos de las tiendas de sus clientes en línea (“Big Data”) le ha permitido descubrir los casos de venta de falsificaciones y avisar a las autoridades policiales.
En los nueve primeros meses del año Alibaba penalizó a 131.000 vendedores de productos ilícitos que utilizaban sus portales, y ha colaborado con la policía china en más de un millar de casos, que provocaron el arresto de unas 400 personas.
En el mismo periodo se eliminó de los portales del grupo, como Taobao.com (para compraventas entre particulares) y sobre todo TMall.com (de empresas a compradores individuales) la oferta de unos 90 millones de productos cuya autenticidad, seguridad y legitimidad estaban en duda. En cerca del 90% de los casos acabó confirmándose que violaban derechos de propiedad intelectual de otras marcas.
Alibaba tiene a cerca de 2.000 personas trabajando en desenmascarar las falsificaciones que se comercializan a través de sus portales, y cuenta con la colaboración de otros 5.400 voluntarios en todo el país.
Aldeas ‘taobao’
El grupo, con sede en Hangzhou (este de China), anunció también hoy nuevas cifras sobre cómo está extendiendo su influencia en las zonas rurales del país no sólo en cuanto a compradores, como era sabido, gracias a la telefonía móvil con conexión a internet, sino en cuanto a vendedores.
De esta manera, está aumentando el número de lo que el grupo llama “Aldeas Taobao”, aldeas y localidades del gigante asiático en las que los habitantes se asocian en la producción, de forma que al menos el 10% de la población del lugar está involucrada en su venta a través de portales de comercio electrónico de Alibaba.
En la actualidad hay ya cerca de 70.000 “Aldeas Taobao”, según la compañía, lo que muestra un importante ritmo de crecimiento en un año, en comparación con las 15.000 que había a finales de 2013. El grupo chino estima que la actividad comercial que rodea a estas asociaciones de producción y comercialización pueden haber creado unos 280.000 puestos de trabajo hasta la fecha en zonas rurales de China (en 2013 la estimación era de 60.000 puestos).