La librería online Amazon ha confirmado que ha pedido a la máxima autoridad de aviación estadounidense, la FAA, autorización para comenzar a probar su servicio de entrega de productos usando drones voladores.
La compañía ha elegido Seattle para probar su servicio Amazon Prime Air porque es allí donde tiene su sede, tal como informa ZDNet.
El objetivo de Prime Air es acortar los tiempos de entrega de forma sustancial, hasta un plazo tan corto como apenas 30 minutos después de que el cliente haga click en el botón con el que se confirma el pedido.
Amazon explica a la FAA que sus drones de reparto han sido probados con éxito en espacios cerrados durante los últimos cinco meses, y que son capaces de viajar a velocidades de hasta 80 km/h con cargas de hasta 2,3 kilogramos.
Desde que fue anunciado el pasado mes de diciembre, el servicio
Prime Air se ha enfrentado a la estricta regulación del espacio aéreo estadounidense.
Para presionar a la FAA, la librería online recuerda que sus drones no son juguetes, y que para su desarrollo ha reunido a ingenieros aeronáuticos, científicos y expertos en robótica entre otros.