Uno de los problemas que se plantea tras el tratamiento de un paciente infectado de ébola o cualquier otra enfermedad infecciosa es cómo desinfectar la habitación en la que ha estado, ya que el virus está presente en los fluidos corporales y puede vivir durante un tiempo fuera del cuerpo del paciente.
Este robot entra en las habitaciones de los centros hospitalarios en los que se presume que pueda haber presencia del virus y procede a su desinfección gracias a una tecnología basada en los rayos ultravioleta. Según sus propios fabricantes, es el único robot de este tipo que cubre todo el espectro de germicidas, gracias a que utiliza gas xenón en lugar de mercurio, capaz de crear los rayos ultravioletas para destruir los virus.
El robot se va moviendo por la habitación emitiendo haces de luz ultravioleta 1,5 veces por segundo, capaces de fusionar el ADN de los virus para matarlos.
De hecho, el CEO de Xenex, Morris Miller, aseguraba recientemente en una entrevista que Little Moe era una herramienta eficaz para el control de la propagación del ébola tanto en suelo estadounidense como en el resto del mundo. Además, según indican los fabricantes del aparato, el ébola es más fácil de destruir que otras enfermedades infecciosas como superbacterias que mutan y se vuelven inmunes a la desinfección. Tanto es así, que el virus del ébola puede ser destruido en apenas un par de minutos.
El robot se utiizó por primera vez en 2010 y su coste ronda los 100,000 dólares.