Llegaron las vacaciones y aunque idealmente usted se encargará de que a sus niños no les falten actividades al aire libre, inevitablemente habrá de llegar el momento en que alguno de ellos le diga: “¿Me prestas tu celular?”. Eso, claro, si ellos no tienen ya su propio aparato.
En cualquier caso, cabe preguntarse qué precauciones hay que tomar para asegurarse de que sus niños, en especial los más pequeños, puedan disfrutar las ventajas de su smartphone o tableta sin que vayan a desconfigurar algo, enviarle correos a su jefe o que se vean expuestos a riesgos de internet.
Entre tantas funciones que maneja un teléfono inteligente, ¿cuáles deben preocuparle? Estos recursos le ayudarán a evitar el libre uso de la cámara y el acceso irrestricto al álbum de fotos, bloquear llamadas o mensajes de texto, poner límites a la navegación por internet y bloquear el envío y descarga de archivos, ya sea por wi-fi o vía Bluetooth.
Lumia y Galaxy para niños
El más reciente miembro de la línea Galaxy de Samsung, el S5, viene provisto de fábrica con un ‘Modo niños’, al igual que los modelos Lumia con Windows Phone, que cuentan con una función llamada ‘Rincón infantil’. Con solo activar tales funciones, el teléfono cambia a una interfaz especial, con íconos más grandes y coloridos.
Podrá definir cuáles aplicaciones puede ver el menor. También aísla los recursos más sensibles para asegurarse de que su niño no les cambie el nombre a sus archivos (o, peor, los borre), ni compre algo en línea. Si bien les permite usar la cámara, lo hace dentro de un ambiente limitado. Lo interesante de este modo para niños es que se activa o desactiva con el sensor de huellas (en el caso del S5) o con una contraseña numérica. En ambos casos, esta función para niños monitorea el uso que los pequeños le dan al móvil, con lo que usted puede leer un reporte de lo que hicieron sus hijos y llevar estadísticas.
Kid Mode para Android
En modelos Android que, a diferencia del S5 no traen la aplicación, se puede descargar Kid Mode by Zoodles. Además de filtros básicos, este sistema multidispositivo bloquea la publicidad para que los pequeños no estén expuestos a mensajes arbitrarios y a menudo no apropiados para todas las edades. Hay una aplicación para Mac y otra para Android, que proponen actividades seleccionadas por edad y facilitan la personalización con el fin de estimular, no restringir, el uso de la tecnología para propiciar el aprendizaje. Hay un modo gratuito, pero si quiere el paquete Premium, prepárese a pagar 60 dólares al año.
iPhone, todo en familia
Con la ventaja de que sus equipos ‘habitan’ un mismo ecosistema, Apple ofrece varias alternativas a la hora de fijar límites al uso del iPhone. Al igual que en cualquier modelo de iPad, lo primero es fijar las restricciones desde la configuración del equipo. Sin embargo, tenga en cuenta que esto se hace bajo la protección de una clave de cuatro dígitos, que es imposible de recuperar. Por nada del mundo se puede permitir olvidarla.
Las restricciones suelen ser estrictas y permiten, por ejemplo, eliminar de los menús las opciones de navegación (Safari) o, incluso, la lista de contactos. Quizás esta sea una medida bastante radical.
La buena noticia es que con iOS7, Apple sumó a su oferta filtros de contenido para sitios web. En el menú de restricciones usted debe decidir si autoriza cualquier sitio o si limita aquellos con contenido para adultos. Es posible, incluso, determinar que siempre se permita ir a un sitio o, por el contrario, que nunca deje abrir otro.
Ahora que iOS8 facilita que las familias compartan la cuenta de iTunes, será más fácil para los padres monitorear lo que compran sus hijos en la App Store. Si un niño desea comprar una app, un mensaje de texto alerta al padre, que debe autorizar o declinar la transacción.