Los dispositivos USB tiene una vida útil limitada, y en algún momento pueden producirse errores que nos dejen con un pendrive inservible. Si queremos intentar recuperar los datos, tendremos que seguir una serie de sencillas pautas.
Si tenemos un pendrive que ha sufrido un percance como una caída, un lavado o directamente no aparecen los datos al conectarlo a nuestro PC, tendremos que buscar algún tipo de solución que nos ayude a recuperar nuestros datos. En primer lugar tenemos que mirar si nuestro ordenador reconoce el pendrive. Si es afirmativo pero no podemos acceder a él deberemos formatearlo. Cualquier herramienta que traiga por defecto el ordenador servirá para formatear y asignar una letra a nuestro USB.
Ahora tenemos el pendrive como nuevo, estando los datos con una pequeña posibilidad de recuperación. Utilizaremos herramientas como EasyDrive Data Recovery o 321 Data Recovery Express (entre muchos otros, de pago o gratuitos), para escanear la unidad. Es posible que se encuentren varios datos, que sean legibles, y otros que directamente están dañados sin posibilidad de recuperación.
Seleccionaremos prácticamente todo lo que escanee y lo volcamos a nuestro ordenador, esperando recupera lo máximo posible. Los archivos rescatados no tendrán su antiguo nombre, sino una numeración estándar. Recomendamos utilizar estos programas antes de formatear el USB, aunque pueden encontrar los datos una vez tengamos un pendrive que lea nuestra computadora.
Si nuestro ordenador no reconoce el pendrive es mucho más difícil recuperar datos, ya que supondría que la unidad no recibe la energía por un posible problema físico. Si son unos datos importantes podemos intentar introducir nuestro pendrive en diferentes sistemas operativos, ya que en ocasiones un pendrive que no lee Windows, lo puede leer Mac OSX o Ubuntu, por ejemplo. Hay ocasiones en que los usuarios creen que sus dispositivos no funcionan por que el ordenador no dispone de los drivers adecuados, o simplemente el PC no quiere leerlo en ese momento.