El FBI ha dado a conocer su sistema de identificación de nueva generación conocido como NGI. Este nuevo recurso permite agrupar datos biométricos de varias fuentes, incluyendo huellas digitales y retratos fotográficos como los que encontramos en distinto tipo de identificaciones y documentos. El trabajo para la construcción del sistema se inicio en 2006, su prueba piloto comenzó en 2011. La herramienta tuvo un costo de miles de millones y paso por la mano de varios contratistas,incluyendo IBM y Lockheed Martin.
El lanzamiento oficial del NGI ha despertado desconfianza, dado que se teme sea utilizado bajo los mismos criterios de acción que emplea la NSA. El sistema no carece de méritos, en efecto sirve para luchar contra el crimen. Por ejemplo, reduce el tiempo de identificación de las huellas digitales de 2 horas a 10 minutos. Sin embargo, el FBI solo tiene 2 millones de las 100 millones de huellas de su base de datos en el sistema NGI. La selección incluye terroristas, abusadores y fugitivos
El gran problema del nuevo sistema es la herramienta de identificación facial por registro fotográfico. La Electronic Frontier Foundation ha señalado que una gran parte de los registros son de criminales, pero una minoría en aumento incluye ciudadanos que no han cometido delitos. Si estas imágenes son sometidas al mismo tipo de examen existe cierto riesgo de una identificación errónea. Para 2015 el FBI espera incorporar 46 millones de imágenes de criminales, pero también 4.3 de civiles. En muchos casos estos civiles son empleados estatales o de compañías contratistas relacionadas.
El sistema funciona de tal manera que casi garantiza la creación de falsos positivos. El NGI no devuelve una identificación puntual, sino que establece una lista con los sujetos que más se parecen a la imagen comparada. La herramienta garantiza que en el 85% de los casos el sujeto buscado estará entre los primeros 50 lugares de la lista si su imagen está en la galería. No queda claro que sucede cuando la persona buscada no están en la base de datos.
Por otro lado la calidad de las imágenes no ayuda. Durante 2011 el estado de Oregon suministró unas 14.408 fotos, la mayoría fue rechazada por tener una muy baja resolución. El programa exige un resolución de al menos 0.75 mega píxeles (una medida de por sí muy baja). La calidad de las imágenes del NGI es incierta, tanto por estos aspectos de definición como por como las afecta la luz o el fondo del retrato.