A partir del mes de septiembre del próximo año 2015, en menos de un año, nuestro país está supuesto a realizar el apagón analógico, que hará posible la televisión digital en República Dominicana; que es la posibilidad de transmitir la señal de televisión en dígitos de ceros y unos, en vez del formato análogo modulado por frecuencia, como todos los canales del país lo hacen en la actualidad. Un cambio que ameritará el uso de cajas decodificadoras para poder ver TV en los televisores actuales no digitales y que requiere que los canales de TV adquieran equipos para transmitir en formato digital.
A menos de un año para que este proceso se implemente, siento que nos falta un largo camino, que aún hay muchos elementos qué considerar y articular, para una realidad que debe de implementarse de forma planificada, y para la cual no tenemos opción, pues la tecnología análoga está prácticamente descontinuada, y junto a los beneficios que ya hemos comentado hay una realidad de evolución tecnológica y obsolescencia que debemos evitar pues tendríamos canales y estaciones de televisión transmitiendo en un formato y baja calidad que no será soportada por los televisores de esta época que disponen de calidades impresionantes como 4K o UHD.
Las estaciones de la televisión dominicana tienen un gran desafío, pues este paso ameritará de grandes inversiones, para un sector que enfrenta en la actualidad una gran crisis, pues cada vez más personas ven contenido de vídeo o de TV por su computadora, tableta o celular, y aún cuando usan su televisor, se conectan a Internet, para disfrutar de contenido por Internet, abandonando cada vez más la oferta televisiva local. Por lo que este paso a la TV Digital puede ser una oportunidad para reinventarse, apelar a la creatividad y adecuarse a los intereses de esta nueva época.
Los próximos meses son fundamentales para la correcta adecuación y transición hacia la televisión digital, pues este proceso implica mucha coordinación, reglamentaciones técnicas y el entendimiento de que este paso tiene múltiples beneficios para el país, si sabemos implementarlo y gestionarlo, pues incluso permitirá que se liberen rangos de frecuencias del espectro radioeléctrico que le permitirían al estado dominicano licitarlos, captando importantes recursos económicos y dando paso a la posibilidad de nuevas empresas o servicios de telecomunicaciones.