En enero, la directora de la división de móviles de Samsung, Lee Young Hee, prometió que el nuevo smartphone insignia de la firma será “diferente”, tras reconocer que el SIII y el S4 resultaron muy similares en lo que respecta a la estética y al diseño. Sostuvo que el S5 configurará un “retorno a lo básico” y que se enfocará especialmente en la pantalla y en la cubierta.
Si bien la ejecutiva no dio más precisiones sobre las características del teléfono ni tampoco confirmó si incorporará el rumoreado escáner de iris, el sitio BGR adelantó algunas especificaciones técnicas que incluiría el smartphone surcoreano.
El S5 traería una pantalla de 5,25 pulgadas con resolución 2K y una cámara de 20 megapíxeles. Además, vendría equipado con un procesador de cuatro núcleos 2.5GHz, 3GB de RAM y batería de 3.000mAh, así como soporte para conectividad 4G y función de control remoto universal.
Samsung lanzaría en Barcelona una segunda variante del teléfono, con distintas características técnicas. La empresa surcoreana también tendría previsto renovar la interfaz (llamada TouchWiz) en su próximo teléfono, con la incorporación de nuevos íconos y tipografía más fina.
La mayor fabricante de móviles del mundo dio a conocer una nueva versión de la invitación a su evento “Unpacked” en el MWC, en donde, al igual que en la primera, abundan las referencias al número 5, escrito en superíndice.
En esta nueva imagen, Samsung incorpora nueve íconos: “Velocidad”, “Aire libre”, “Curiosidad”, “Diversión”, “Social”, “Estilo”, “Privacidad”, “Salud” y “Vida”. Sobre el final de cada una de esas palabras, aparece un pequeño cinco. Estos nuevos íconos podrían apuntar a las distintas áreas de interés en que se centrará el nuevo teléfono, o bien en nuevas aplicaciones a incorporar en él.
Solo resta esperar el inicio del MWC y conocer además cuáles serán las apuestas de las demás compañías del sector para competir con Samsung.