Gionee Elife E8 todavía no está en el mercado. Ni siquiera se ha presentado oficialmente, ni se han anunciado sus características definitivas.
El smartphone es capaz de capturar fotografías de 100 megapíxeles, una resolución que difícilmente habrás podido conseguir con cualquiera de las cámaras que tengas. ¿Cómo lo hace? Pues todo es gracias a una cámara cuyo sensor es de 23.8 megapíxeles.
Al proceso se le denomina interpolación, y gracias a este se consigue, por ejemplo, que una imagen de una resolución determinada, pueda ser de una mayor resolución a pesar de que el sensor nunca fue capaz de capturar tanta información.
En realidad, la interpolación es un procesador que nos ha acompañado en la historia de la captación de imágenes desde hace muchísimo tiempo. Consiste en multiplicar la cantidad de puntos o píxeles de una imagen, y asociar el valor, o color, de cada uno de esos puntos, en función de los que tiene alrededor.
Imagina que has capturado una fotografía con una cámara, y quieres imprimirla para llenar una pared con dicha foto. No has captado una foto con tanta resolución, pero gracias a un proceso de interpolación puedes conseguir que la imagen sea del tamaño que quieras. La interpolación tiene sus límites, y hay diferentes tipos de procesos a la hora de interpolar, pero en general, es algo muy utilizado en la fotografía a la hora de imprimir.
Claro está, esto no nos asegura una mayor calidad, e incluso podría ser realizado por nosotros mismos con una cámara cualquiera, siempre y cuando sea de una resolución alta