El explorador Sam Cossman no le tiene miedo a la lava. Prueba de esto es que, por segunda ocasión, emprendió una travesía al volcán activo Marum, en la isla de Vanuatu, en el Pacífico Sur.
Esta vez, el joven llegó acompañado de drones DJI Phantom 2, equipados con cámaras GoPro para reproducir imágenes del cráter.
Según Cossman, quien vestía un traje especial protector, los visuales podrían ayudar a científicos a anticipar actividad volcánica.”El dron no pude acercarse tanto a la lava como hice yo, porque, literalmente, se hubiese derretido como sopa”, manifestó el cineasta.
Como era de esperarse, los aviones no tripulados resultaron afectados por las altas temperaturas del volcán, pero el grupo pudo recuperar imágenes de alta definición de la lava hirviendo.