La consultora PTC&C ha recopilado los datos acerca de los carros que tienen mayor probabilidad de sufrir un hackeo de sus sistemas debido a vulnerabilidades que afectan a componentes como el GPS, el sistema de aceleración y frenado o la propia dirección del vehículo. Ya os comentamos el caso de modelos como el Jeep Cherokee que podía ser manipulado de forma remota pero no es el único.
Infiniti Q50 (2014)
El Infiniti Q50 basa buena parte de su conectividad en el sistema Infiniti Connection System, aunque eso lo expone a vulnerabilidades vía Bluetooth, redes móviles y radio que pueden afectar a la asistencia en la conducción y a la dirección. La compañía avisó a los usuarios en el año 2013 de un problema detectado en el software que gestionaba la dirección.
Toyota Prius (2010/2014)
El caso del Toyota Prius ha sido de lo más sonado en el sector, ya que la marca asiática tuvo que mandar a reparación a casi 2 millones de modelos de Toyota Prius por un problema en el sistema del control híbrido.
Ford Fusion (2014)
Un caso parecido al de Jeep es el del Ford Fusion, ya que algunas funciones de estos modelospodían ser manipuladas por los hackers a voluntad de forma remota a través del Sync System. El problema afectaba al cierre del vehículo y la red móvil.
Cadillac Escalade (2015)
El Cadillac Escalade se enfrenta a una grave vulnerabilidad debido a que el control de potencia, los frenos o la dirección, comparten red con el Bluetooth, o la app del coche por lo que un fallo en el sistema On System puede afectar a casi cualquier elemento.
Jeep Cherokee (2014)
El caso del Jeep lo tenemos más fresco ya que como os dijimos una pareja de hackers demostraron de primera mano que eran capaces de controlar aspectos como el frenado o la aceleración del vehículo y acceder al navegador de abordo para mostrar incluso mensajes en él. Todo esto siendo posible incluso desde muchos kilómetros de distancia.
Los vehiculos con menos riesgo de hackeos
Dejando de lado los modelos más antiguos que no gozan de funciones de conectividad, en el otro extremo tenemos modelos como Audi A8 de 2014, el Dodge Viper, el Honda Accord de 2014 o el Tesla Model S. Aunque estos coches incorporan algunas funciones y tecnologías de los nuevos smartcars, la comunicación entre componentes internos y piezas del coche es menor con lo que se reducen los riesgos.