A principio de año, un drone cargado con una pequeña cantidad de arena radioactiva sobrevoló el techo de la oficina del primer ministro de Japón. Este acto de protesta contra las políticas de energía nuclear alertó a las autoridades ante futuras amenazas. Para combatir este tipo de problemáticas,la Policía Metropolitana de Tokio presentó un escuadrón de drones aéreos con redes diseñadas para interceptar otros objetos voladores.
De acuerdo con un reporte presentado por The Asahi Shimbun y Asian Review, el cuerpo de seguridad incorporará uno de estos dispositivos en un período de prueba en diciembre. En febrero de 2016 se sumarán nuevas unidades al equipo. Estos drones estarán ubicados cerca de los edificios más importantes de la capital nipona, incluyendo el Palacio Imperial y la oficina del primer ministro, entro otros.
“Los ataques terroristas utilizando drones son una posibilidad muy real”, explicó un miembro de la policía para el Asahi Shimbun. “Esperamos defender a la nación con los mejores resultados posibles”.
Cabe destacar que los drones estarán equipados con una red de dos metros de largo por 2 de ancho, lista para capturar los objetos voladores no identificados. Esta estrategia fue concebida como un método no agresivo para evitar lastimar a civiles inocentes.