La compañía Tesla ha confirmado una de las novedades más esperadas en su esperada entrada en el sector de la energía doméstica. Se llama Powerwall, mide 1,3 metros de alto y 68 centímetros de ancho, y es una batería solar low-cost para hogares y empresas que el director de la empresa, el magnate Elon Musk, promete que se convertirá en la “pieza fundamental” para conseguir un mundo energéticamente sostenible.
De momento, la empresa de coches eléctricos la venderá solo en Estados Unidos a un precio de 3,500 dólares
Las baterías, de litio ionizado, podrán almacenar hasta 10 KWh de energía a través de paneles solares y eólicos. Una energía que podrá ser reutilizada en los días de poco sol, cuando se produzcan cortes del suministro o cuando los costes eléctricos se hayan disparado.
El nuevo producto de la compañía de Musk no es una novedad absoluta. La japonesa Toyota ya cuenta con una batería de hidrógeno que puede sacarse del Toyota Mirai para dar energía a una casa durante una semana. Pero Tesla sí parece enfocar su invento hacia la idea de que todos los usuarios domésticos del mundo puedan desconectarse de la red y ser autosuficientes combinando paneles solares con baterías de hidrógeno.