¿Marketing o extorsión? Esta es la pregunta que muchas empresas se hacen a la hora de comprar los nuevos dominios .sex, .xxx, .porn y .adult. Compañías de todo el mundo prefieren reservar estos dominios para mantener a salvo a sus marcas y no relacionarlas con el mundo de la pornografía.
La empresa detrás de todo este sistema es ICM Registry (quien también es dueña del dominio .sucks) y ha alcanzado una cantidad de registros en el dominio .sex que ha superado sus propias expectativas.
Un modelo de negocio polémico
Empresas como Apple y Nintendo han preferido pagar para evitar malosentendidos con sus usuarios. Y no son los únicos, hace poco los famosos actores Ashton Kutcher y su esposa Milani Kunis compraron un dominio .sex con el nombre de su hijo para prevenir el uso indiscriminado de este. Muchos de los compradores de este tipo de dominios son las propias empresas y famosos que se ven obligados a hacerlo para mantener a salvo a sus marcas.
Pero esta no es la única crítica que tienen estos dominios. El Centro Nacional sobre la Explotación Sexual pide que se considere ilegal un negocio como este porque estaría propiciando un incremento en la pornografía en la red.
Según ICM Registry, la creación de estos dominios son de hecho beneficiosas pues ayudan a los consumidores de “entretenimiento adulto” ha conseguirlo con mayor facilidad y seguridad, a los productores de este material a llegar más fácilmente a su público y a aquellos que quieren evitar estas páginas a crear un filtro para este tipo de sitios. Sin embargo ha evitado comentar sobre las críticas contra su modelo de negocio al que califican como “extorsión indirecta“.
El lanzamiento de este polémico dominio se realiza en tres fases: primero todas las empresas y famosos afectados tendrán un plazo de un mes para comprar sus dominios, luego los propietarios de los dominios .xxx y similares podrán reservar también un dominio .sex, y finalmente el 4 de noviembre se liberarán los registros quien sea que este interesado en comprar alguno de estos dominios.