Disney y Google se lo piensan dos veces antes de presentar una oferta formal por Twitter. El cambio repentino de planes se conoce cuando se esperaba que la plataforma social empezara el proceso de puja entre los potenciales interesados. El abandono de sus principales pretendientes provocó así que la valoración de la plataforma social se viniera abajo, hasta dejarse un 15% en la apertura de Wall Street.
Twitter llegó a apreciarse casi un 35% desde que a finales del pasado mes de septiembre empezarán a circular los primeros nombres de interesados por su negocio. Disney se veía como la mejor opción, porque el conglomerado de medios suele ser muy exitoso al explotar las adquisiciones que realiza y porque tiene una necesidad imperiosa de buscar nuevas vías de distribución de contenido. Las redes sociales, por otro lado, son un negocio que se le resiste a Google.
La salida de ambas facilitaría las cosas, sin embargo, a Salesforce, que vería la compra de Twitter como una vía para aplacar a Microsoft tras la adquisición de LinkedIn. La tecnológica de Redmond también podría aprovechar el alboroto para mover ficha, como se especuló durante las últimas semanas. Facebook está al margen.
Marc Benioff, consejero delegado de Salesforce, comentó este pasado miércoles que siempre está abierto a cualquier oportunidad para reforzar su negocio. Pero aunque señaló que Twitter es un muy buen producto, también indicó que “afronta retos muy complejos”. Esta misma semana su compañía anunció la compra de Krux por 700 millones de dólares.
Twitter sumaba a finales del pasado mes de junio 313 millones de usuarios, que le aportaron 602 millones de dólares en ingresos. El 85% de ese total acceden a la plataforma social a través del móvil. La compañía no solo tiene dificultad para crecer, además arrastra este año pérdidas de 187 millones. Su capitalización bursátil ronda los 19.500 millones tras apreciarse un 25% el último mes.