Google Chrome parece estar ganando la guerra de navegadores de Internet. Estadísticas dadas a conocer por la empresa especializada Netmarketshare indicaron que el navegador de Google sobrepasó por primera vez al clásico Internet Explorer de Microsoft, con una participación de mercado del 41,7% de los usuarios de computadoras, frente al 41,3% de su rival.
Este mercado está dominada por un puñado de compañías. Además de Google Chrome, los más populares incluyen Internet Explorer, Firefox, Safari, Opera y Konkeror.
-El último en la lista de grandes: Konkeror-
Con el 0,01% del mercado, Konkeror es el navegador más pequeño que figura en las estadísticas de Netmarketshare.
Funciona con Linux, dentro del llamado proyecto KDE, que se define como un equipo internacional que coopera en el desarrollo y distribución de software libre y de código abierto para computadoras de escritorio y portátiles.
Konkeror opera dentro del conjunto de programas que forman el entorno de escritorio KDE. Y como todo lo que toca a esos programas, es libre y de acceso gratuito.
Sus simpatizantes encuentran que se integra muy bien con el entorno y que es altamente personalizable. Podría considerarse como un navegador para un nicho muy específico.
-La nueva apuesta de un viejo jugador: Microsoft Edge-
Es el sustituto del que una vez fuera el rey de la navegación, para luego convertirse en uno de los programas más odiados del mundo: Internet Explorer.
Microsoft Edge fue lanzado en el 2015 de la mano de Windows 10.
La crítica fue mixta. Algunos dijeron que era infinitamente mejor que Internet Explorer; otros renegaron de un diseño poco amigable, que notaron en detalles como la ausencia de una barra de URL.
“Quizás la ventaja más grande de Microsoft Edge que es no es Internet Explorer”, decía la revista PCMag.
El medio especializado The Verge fue un poco menos duro: “Navegar en Microsoft Edge puede ser una delicia, las páginas se cargan rápido, el desplazamiento es un paseo y los problemas de renderización son mucho menos comunes”.
-Uno de los más mencionados: Maxthon-
El de Maxthon es un nombre que salta con frecuencia cuando se buscan navegadores alternativos.
Aunque no figura en las estadísticas gruesas de Netmarketshare, este navegador, desarrollado por una compañía china, tiene buena crítica en tiendas de aplicaciones como la App Store de Apple y Google Play.
Una de las razones es su velocidad, y es que los entusiastas de Maxthon lo encuentran bastante más rápido que Google Chrome.
La otra es que funciona con diferentes sistemas operativos -desde Windows hasta Mac, y de Android hasta iOS-. Esto es una ventaja cuando se trata de sincronizar diferentes aparatos.
Otras beneficios que se le atribuyen son la facilidad para configurarlo y la posibilidad de activar un bloqueador de publicidad, que se dice muy efectivo.
-El chico nuevo del vecindario: Vivaldi-
El editor de PC World Mark Hachamn lo llama el “nuevo contendor en el mundo de los navegadores”.
Fue creado por el ex director general de Opera, otro navegador que figura al final de la lista de más usados de Netmarketshare, con la idea de ofrecer una herramienta amigable y rendidora, más que atractiva. En este sentido, está ideada para “usuarios expertos”.
Funciona con Windows, Linux y OS X. Asimismo, ofrece la posibilidad de configurar un “marcado rápido”; es decir, una serie de páginas que quedan en la portada del navegador y a las que se puede entrar con un solo clic.
Otros elementos clave también pueden personalizarse. “La interfaz por defecto puede arreglarse completamente, anclando barras de tabulador, barras de URL, barras laterales y mucho más donde quieras”, dice la revista Ars Technica.
En suma, la recepción parece haber sido bastante entusiasta. Aunque quizás sea temprano para emitir un veredicto.
-Uno de los confines del universo: Alienforce-
Este último navegador se gana un puesto en la lista por el factor curiosidad.
“Muchas personas aman Firefox. Los extraterrestres, entretanto, probablemente están usando Alienforce”, dice el bloguero Victor Clark en un artículo titulado “Seis navegadores alternativos de los que deberías enterarte”.
Se trata de una herramienta muy parecida a Firefox y, en este sentido, está dirigida al público en general.
De acuerdo con la crítica, no es particularmente rápida o eficiente (o lo contrario). Pero “puede darte una sensación extraterrestre gracias a su diseño”, dice Clark. “Si crees que la verdad está allá afuera, entonces te gustará este buscador”, agrega.