Los adultos mayores cada vez más, superan los miedos y obstáculos para acceder a los beneficios de internet. .
Si bien es cierto que los ciudadanos de la tercera edad siguen siendo el grupo demográfico que entra más tarde al consumo de nuevas tecnologías, las cifras indican una tendencia creciente en materia de consumo de internet fija y móvil. En Estados Unidos, un estudio del Pew Research Center cifró en seis puntos el aumento de los últimos dos años.
La proporción de adultos mayores con destrezas digitales llegará, afirma un estudio del U.S. Census Bureau, a doblarse antes de 2050.
¿Cómo lograrlo?
Si usted tiene en su familia a un adulto mayor que desea acercarse al mundo digital, lo primero que se debe hacer es identificar las razones que le llevan a querer aprender.
Es común que algunos adultos mayores, lo que realmente desean es saciar una curiosidad, y no quedarse sin poder hacer algo que todos los demás hacen.
Otros tienen más identificadas realmente sus propósitos: beneficiarse: poder comunicarse con familiares en otros lugares, ayudar a sus hijos o nietos, o incluso desarrollar alguna actividad productiva o recreativa que involucre texto, fotos o presentaciones.
Cuidar la salud
Hay que tener cuidados especiales con la salud de los ‘tecnoabuelos’. Probablemente una tablet sea mejor que un celular, pues ofrece una pantalla más grande. No todos tienen de inmediato la destreza para usar pantallas touch, por lo que el computador de escritorio es una opción ‘amigable’ para comenzar.
Los expertos recomiendan ajustar el tamaño de la letra de la pantalla a uno que le resulte fácil de leer y cuidar que el brillo de la misma no resulte ni excesivo en condiciones de poca luz ni muy bajo en espacios más iluminados. El cuidado de los ojos es prioritario, pues hay riesgos reales para los mayores.
Otra recomendación es proteger las muñecas y, en lo posible, optar por notas de voz en lugar de los mensajes de texto para proteger las articulaciones de las manos de lesiones como el síndrome del túnel del carpo.
Los riesgos para los ojos
Debemos reconocer que los adultos mayores stán expuestos cada vez más a la luz azul violeta que emiten los equipos, lo que representa cada día más un aumento de enfermedades en la córnea, cristalino y retina.
Frente a esta situación, algunos de los riesgos más comunes es adquirir degeneración macular asociada con la edad, que consiste en el envejecimiento prematuro de la retina que va destruyendo lentamente la visión e impidiendo realizar ciertas actividades y, también, fatiga visual que son ciertas molestias oculares.
Algunas prácticas saludables son utilizar los dispositivos electrónicos a una distancia mínima de 50 centímetros. No utilizar los dispositivos con altos niveles de luminosidad y realizar ejercicios para los ojos como parpadear, hacer pausas activas y fijar la mirada periódicamente a otro punto. Además, es aconsejable utilizar unos lentes antirreflejo o lentes Transitions que ayuden a bloquear la luz nociva.