Tras un proceso que duró más de siete meses, donde fueron presentados unos 83 proyectos, la Oficina Nacional de la Propiedad Industrial (ONAPI) anunció los ganadores del “Primer Concurso de Tecnología Apropiada, Soluciones Innovadoras para la Vida Cotidiana”.
Luego de la selección de diez finalistas, los nombres de los tres proyectos ganadores del concurso fueron dados a conocer en un acto realizado con la participación de los representantes de la Organización Mundial de la Propiedad Intelectual (OMPI) y la Oficina Coreana de Propiedad Intelectual (KIPO), instituciones copatrocinadoras junto a ONAPI, de este concurso.
La premiación fue presidida por Sandy Lockward, directora de ONAPI; Hyun-suk Lim director de la División de Asuntos Multilaterales de KIPO; Taemin EOM, consejero de la Oficina Regional para Asia y El Pacifico de OMPI y Oswaldo Girones, consejero de la Oficina Regional para América Latina y el Caribe de OMPI, con la presencia de Hangu Oh, embajador de Corea en el país.
Es la primera edición latinoamericana de este concurso que KIPO ya ha patrocinado en Asia y África.
A petición del país, estuvo enfocada al importante sector agroindustrial, un motor del desarrollo competitivo de la Nación.
Inició el 1 de septiembre de 2015, con una campaña de difusión en medios masivos y decenas de talleres a nivel regional, para motivar a los potenciales participantes. El alto número de proponentes ha sobrepasado las expectativas de los organizadores.
El jurado multidisciplinario integró a representantes de entidades privadas como la Junta Agroempresarial y públicas como el Ministerio de Economía Planificación y Desarrollo, el Ministerio de Educación Superior, Ciencia y Tecnología, El Consejo Nacional de Investigaciones Agropecuarias y Forestales así como examinadores de patentes de ONAPI.
Cada concursante seleccionó un problema específico de la agroindustria dominicana, buscando innovaciones en la base de patentes y adaptando las mismas a la tecnología local.
Entre los proyectos finalistas se encuentran un abono orgánico, una máquina para guayar yuca, un dispositivo protector para bombas sumergibles, un muro eficientizador de lluvia, un sistema automático para capturar agua a partir de la humedad ambiental para el reguio agrícola, varios plaguicidas ecológicos, líneas secadoras de cacao, entre otros.
Como requisito, ONAPI exigió a los participantes familiarizarse con el uso y consulta de las Bases de Datos de Patentes, para lo cual desarrolló un ciclo de Talleres de Visión General impartidos por técnicos de esta Oficina en universidades y centros académicos del Distrito Nacional y varios puntos del país, donde hicieron ejercicios de búsquedas de información tecnológica y conocieron aspectos básicos de la competencia.
ONAPI continúa así sirviendo de soporte a la innovación tecnológica en el país.