Poder llevar el ordenador de vacaciones es uno de los deseos de muchos ‘gamers’ en todo el mundo. Las consolas portátiles existen pero no permiten jugar a los mismos títulos que en el computador. Ahora, sin embargo, nace Portable Game System (PGS), una consola portátil que funciona con Windows 10 y que permite jugar a juegos PC en cualquier parte.
PGS ha aparecido en Kickstarter para dar solución a los amantes de los videojuegos que quieren jugar cuando están fuera de casa. La consola tiene un tamaño similar al de la Nintendo 3DS aunque sus responsables explican que desarrollarán un modelo de 5,5 pulgadas con pantalla HD y otro de 5,7 con pantalla QDH y mayor memoria RAM. La consola funciona con Windows 10 pero según explican también podrá instalarse el sistema operativo de Google, Android. Las dos tienen una pantalla secundaria de 4,5 pulgadas.
Según Xataka El hardware interno es común a ambas y se trata de un Intel Atom X7 (Z8750) de cuatro núcleos que funciona a 2,56GHz. En el modelo gordo va acompañado de 8GB de RAM y 128GB en formato SSD, mientras que en el Lite, esas cantidades se reducen a la mitad. Otras diferencias importantes las tenemos en las cámaras y baterías: 6.120mAh, 8 y 5 megapíxeles en el modelo potente, y 4.080mah con 5/1 megapíxeles en el Lite.
Sus creadores dicen que los prototipos no tienen problema para ejecutar juegos conocidos como “Batman: Arkham City”, “Dark Souls 2”, “DmC: Devil May Cry”, “Mirror’s Edge”, o “Metal Gear Rising: Revengeance”.
La consola aún tiene hasta el 31 de julio para seguir sumando ‘fans’ y adeptos en su campaña de Kickstarter, donde buscaba una meta de 100.000 dólares y ya ha conseguido duplicarla, en tan sólo unosdías, alcanzando más de 210.000 dólares y casi 800 patrocinadores. Desde 230 dólares en su modelo básico y 280 el modelo ‘hardcore’, los financiadores en Kickstarter pueden conseguir la consola que tendrá una entrega estimada para marzo de 2017, con envíos a cualquier parte del mundo.