Comprar un nuevo iPhone es un deseo que no todos pueden cumplir. Los dispositivos de Apple no son precisamente baratos y no hay una razón poderosa de adquirir uno nuevo, si tu iPhone antiguo sigue funcionando como debe.
Pero, ¿qué pasa si te enteras que “accidentalmente” has estado rompiendo tu iPhone a propósito para justificar la compra de uno nuevo?
De acuerdo a una reciente investigación, eso es exactamente lo que estamos haciendo. Un reciente estudio de la Escuela de Negocios de Columbia arrojó que las personas son menos cuidadosas con sus teléfonos, incluyendo el iPhone, cada vez que aparece un nuevo modelo.
Es el fenómeno llamado “upgrade effect” (efecto modernizar) según afirman en el estudio Silvia Bellezza, profesora asistente de marketing en la Escuela de Negocios de Columbia; Francesca Gina, profesora de administración de negocios en Harvard; y Josh Ackerman, profesor asistente de psicología en la Universidad de Michigan.
Si bien los participantes no fueron descuidados con sus iPhone, o los rompieron deliberadamente, el estudio demuestra que, cada vez que aparece un nuevo modelo, los usuarios se vuelven más negligentes con sus actuales teléfonos.
El estudio fue publicado a inicios de mes en la revista de la Asociación de Marketing Americana, según informa la web Gizmodo.
A propósito de este estudio, un comercial de Virgin llamado ‘Accidentes felices’ deja en claro este sentimiento de desapego cuando vemos que se promociona un producto mejor.
“Nos sentiríamos culpables si compramos un producto nuevo sin razón aparente, pero si nuestro producto actual estuviese dañado, entonces sí tendríamos una justificación”, comenta Silvia Bellezza en un comunicado. “Así que utilizamos nuestros teléfonos en la lluvia, o dejamos la laptop en un sitio inseguro sin saber que hay una motivación escondida”.