Coincidiendo con la presentación de unos malos resultados, Twitter anunció hace dos semanas que cerraba su aplicación de vídeos Vine. Sin embargo, la aplicación de vídeos podría finalmente no echar el cierre ya que podría acabar en manos de otra empresa.
Según informa TechCrunch, la empresa que dirige Jack Dorsey estaría ahora en conversaciones con cinco compradores potenciales interesados en hacerse con el servicio de microvídeos.
El medio apunta a que la aplicación ha despertado especial interés entre compañías asiáticas que ven en Vine una oportunidad de mercado para aterrizar en EEUU y, de paso, potenciar el servicio de vídeo en el mercado oriental.
Eso sí, la venta de Vine podría no generar unos ingresos significativos a Twitter, ya que algunas fuentes apuntan al medio que la puja podría estar en torno a los 10 millones de dólares. Sin embargo, con la venta la compañía de Dorsey se evitaría el protocolo para llevar a cabo el cierre y la atención a sus creadores para gestionar el fin de sus cuentas.
A día de hoy Vine supone más quebraderos de cabeza y gassto de recursos que beneficios para la compañía, de ahí que Twitter haya anunciado su cierre. Y es que el diario The New York Times apuntaba el pasado octubre que Vine costaba 10 millones de dólares mensuales a las cuentas de Twitter, una inversión que no compensa a la red social del pájaro azul que está apostando por otros formatos de vídeo más rentables.