Una vulnerabilidad informática en Facebook Messenger recién resuelta por la empresa permitía a usuarios y ciberdelincuentes manipular conversaciones en este servicio de mensajería e incluso eliminar mensajes, fotos, archivos o enlaces.
El fallo se debía a un problema de configuración en la aplicación Messenger con bajo riesgo porque sólo permitía alterar el contenido de mensajes enviados por uno mismo, según un comunicado enviado por Facebook.
La vulnerabilidad se solucionó “de forma inmediata” pese a que implicó un cambio de infraestructura del sistema, concluido justo este martes, que ha sido implementado en distintas fases después de que Facebook fuera informada de ello a principios de este mes por parte de la empresa de seguridad Check Point.
Así lo avanzó previamente en rueda de prensa el director general de Check Point para España y Portugal, Mario García, tras valorar especialmente la celeridad de Facebook para solucionar conjuntamente con su compañía el problema sin que los usuarios se hayan visto perjudicados en sus comunicaciones durante ese proceso.
No se han facilitado datos del impacto que hayan podido tener los posibles abusos de esta vulnerabilidad, aunque se ha destacado que los fallos en aplicaciones como Messenger de Facebook, manejadas por millones de usuarios, resultan muy atractivas para los cibercriminales por el elevado número de supuestas víctimas, ha añadido García.
Ha explicado que la manipulación de contenidos en redes sociales tiene serias repercusiones en ámbitos como el legal por ser considerados como pruebas en investigaciones judiciales. También en el área comercial, como testimonio de acuerdos y tratos en negocios