La Alianza Wi-Fi anunció la próxima versión del estándar de conectividad inalámbrica Wi-Fi, llamada 802.11ah (la más reciente es la 11ac). Una de sus mayores novedades es la inclusión del modo HaLow, pensado para el hogar conectado, los periféricos (sobre todo, la tecnología vestible como relojes inteligentes y pulseras deportivas), y el uso en automóviles, además de aplicaciones de la Internet de las cosas.
Wi-Fi HaLow logra un consumo de energía similar al Bluetooth (es decir, mucho más bajo que el Wi-Fi convencional, vital para dispositivos que funcionan con una batería pequeña), pero con un rango de cobertura mucho mayor, gracias al uso de la banda de 900 MHz para transmitir datos. Una conexión Bluetooth tiene un límite de unos diez metros; una conexión Wi-Fi HaLow podría cubrir toda una casa.
Esto es gracias a que la banda de 900 MHz permite una mayor penetración y más área de alcance (como la banda de 700 MHz usada para televisión o telefonía móvil), pero con un ancho de banda considerablemente menor al Wi-Fi normal (que funciona en las bandas de 2,4 y 5 GHz); aun así, será mayor al del Bluetooth.
A la vez, usa los mismos protocolos de conectividad que el Wi-Fi convencional, así que podrá conectarse a un router compatible para tener conexión directa a Internet, o vincularse con otro dispositivo Wi-Fi vía Wi-Fi Direct (que funciona como una conexión entre dos dispositivos similar a la que plantea Bluetooth).
Habrá que esperar a 2018, sin embargo, para que comiencen a aparecer los primeros dispositivos certificados como HaLow.
Bluetooth también evoluciona
Mientras, el grupo que desarrolla Bluetooth confirmó en noviembre último que para este año mejorará los protocolos de conectividad para permitir un mayor alcance de la tecnología, más velocidad de transferencia de datos y la posibilidad de crear redes mesh (en las que cada dispositivo conectado extiende la cobertura de la una red) para la próxima versión de Bluetooth.
Esto incluye cuadruplicar el alcance de Bluetooth Smart, y duplicar su capacidad sin aumentar el consumo de energía.
La versión más reciente de Bluetooth es la 4.2, que incluye la posibilidad de que un dispositivo que tenga un chip con ese estándar tenga conexión directa a Internet, soporte para IPv6 y otras funciones clave para la Internet de las Cosas.
Es ese segmento al que apuntan ambos grupos de desarrollo: apuestan a ser parte de un mercado (el de la Internet de las cosas) que podría facturar 2 billones de dólares o más para 2025, según consultoras como IDC o Gartner.