Amazon está poniendo a prueba un nuevo servicio de entrega con el objetivo de que más productos estén disponibles para la opción de entrega gratuita en dos días, para así poder aliviar el congestionamiento en sus almacenes, de acuerdo con dos personas familiarizadas con el plan. La estrategia llevaría al distribuidor minorista digital a entrar en áreas operadas por sus socios UPS y FedEx
Amazon supervisará la recogida de paquetes de almacenes de los comerciantes que venden sus productos en su web y dirigirá la entrega a los domicilios de clientes, dijeron las fuentes, una tarea que en la actualidad es gestionada a menudo por UPS y FedEx. Amazon aún podría utilizar estos servicios de mensajería para la entrega, pero la compañía decidirá cómo se envía un paquete en vez de dejarlo en manos del vendedor.
Gestionar más entregas por cuenta propia daría a Amazon una mayor flexibilidad y control, le permitirá ahorrar dinero a través de descuentos por volumen y evitaría la congestión en sus propios almacenes al mantener la mercancía en las instalaciones de los vendedores externos.
Las acciones de FedEx cayeron un 2.4% en las primeras operaciones del jueves tras conocerse la noticia, mientras que UPS cayó un 2.2%. FedEx no hizo comentarios inmediatamente, y UPS no devolvió de inmediato llamadas y un correo electrónico en los que se solicitaban comentarios.
El año pasado, Amazon introdujo Seller Fulfilled Prime, una opción que permite a los comerciantes que no guardan artículos en los almacenes de Amazon seguir promocionando sus productos con la etiqueta de Prime, la cual garantiza que serán entregados en un plazo de dos días. Los comerciantes tenían que demostrar que podían cumplir el plazo de entrega garantizado por Amazon, y muchos usaron UPS y FedEx para estas entregas. El nuevo servicio transfiere a Amazon el control de esas entregas, incluso si continúa utilizando servicios de entrega de terceros.