Los usuarios en China de la popular aplicación de telefonía WhatsApp han sufrido problemas de acceso en los últimos días en lo que parece una nueva medida para endurecer la censura de cara a la celebración del congreso del Partido Comunista.
Desde la pasada semana, los servidores de WhatsApp en este país detectaron bloqueos intermitentes en la aplicación, aunque en los últimos dos días el bloqueo parece permanente, según pudo comprobar Efe.
WhatsApp, que encripta sus mensajes y dificulta que éstos puedan ser monitorizados por terceros, es utilizada por disidentes o activistas para evitar las aplicaciones chinas que pasan información al régimen y compartir información de manera segura. Se sospecha que el endurecimiento de la censura se debe a la proximidad del XIX Congreso del Partido Comunista, que comienza el próximo 18 de octubre y en el que se esperan cambios en la cúpula del régimen, aunque el presidente Xi Jinping continuará al frente del mismo.
El pasado mes de julio, los usuarios ya encontraron problemas a la hora de enviar fotos y vídeos a sus contactos, que algunos medios locales atribuyeron a una estrategia del Gobierno para perjudicar a WhatsApp en favor de su rival local, la aplicación WeChat, que colabora con la censura del país borrando mensajes o cuentas enteras con material político “sensible”.
La Administración del Ciberespacio de China (ACC) ha anunciado diferentes normativas para endurecer su control en internet, donde a partir de octubre se obligará a verificar las identidades reales de los usuarios y aumentará el control sobre el contenido de los comentarios realizados en las redes sociales.
En los últimos meses, las autoridades chinas han incrementado las restricciones sobre qué noticias pueden elaborarse y distribuirse a través de la red y han lanzado una campaña contra los servicios de VPN que permiten a los usuarios acceder a páginas extranjeras de internet censuradas por las autoridades.