El presidente de Nintendo, Tatsumi Kimishima, reconoció que los ingresos derivados del lanzamiento del Super Mario Run para smartphones “no cumplieron las expectativas” bajo el modelo en que se deben pagar cerca de US$10 para acceder a la versión completa del juego.
Las declaraciones de Kimishima recogidas por Nikei se dan días después de que se lanzara la versión de Super Mario Run para el sistema operativo Android.
La reedición del juego emblema de la empresa japonesa para dispositivos móviles había tenido un primer capítulo con su lanzamiento en diciembre pasado en el repositorio App Store, donde consiguió casi tres millones de descargas durante su primer día.
Sin embargo, el éxito de descargas no fue acompañado por la compra de la versión completa por parte de los usuarios que se reusan al modelo “paga una vez y juega” al que apuesta Nintendo.
Desde la empresa japonesa adelantaron su rechazo a la adopción de un modelo de ventas donde el usuario no paga por niveles sino por herramientas y habilidades para los personajes.
En diciembre y con motivo del primer lanzamiento del Super Mario Run, las acciones de Nintendo se desplomaron y, a pesar de haber repuntado durante los últimos meses y en especial durante la última semana, aún no alcanzaron los valores de fines del 2016.