Uno de los experimentos más extravagantes de Google fue Glass, los lentes de realidad aumentada que brindaban información contextual ante los ojos del usuario. El concepto fue anunciado con bombos y platillos pero nunca pudo conquistar a los usuarios, por lo que perdió prioridad en los planes de la empresa.
Su salida del foco de atención no significó el fin del proyecto. Por el contrario, la firma de Mountain View siguió trabajando en él con el objetivo de adaptarlo a las necesidades de sus clientes corporativos. Luego de un extenso periodo de pruebas, Glass está listo para volver al ruedo.
El flamante Glass Enterprise Edition estará disponible a través de socios de Google, que personalizarán su software en base a las necesidades del cliente. La lista de partners incluye a Augmedix, cuya versión automatiza la toma de anotaciones para los médicos cuando interactúan con sus pacientes; Upskill, que se especializa en transmitir instrucciones visuales y de audio a los mecánicos de GE Aviation para que no tengan que apartar la vista de sus tareas cuando necesitan orientación; y Ubimax, que construyó una solución para DHL que permite a sus empleados no depender de instrucciones en papel en la gestión de paquetes, aumentando la eficiencia en un 15 por ciento.
En cuanto al gadget, se diferencia de su antecesor por su diseño más ligero y puede utilizarse tanto en gafas de prescripción médica como en las de seguridad. También mejoró su procesador, su antena WiFi, la cámara y la duración de su batería, cuya autonomía pasó a ser de 8 horas. Un detalle más: Ahora enciende una luz para que se sepa que está capturando fotografías o videos.