Toshiba acordó vender a un grupo liderado por la firma estadounidense de capital privado Bain Capital su valiosa unidad de semiconductores, un paso clave para mantener en la bolsa de Tokio al conglomerado japonés.
En un giro de última hora en un proceso de adquisición largo y altamente polémico, Toshiba anunció la firma de un acuerdo por un valor de unos 2 billones de yenes (18.000 millones de dólares).
Bain Capital se asoció con la surcoreana SK Hynix Inc y con otros compradores estadounidenses de los semiconductores de Toshiba, como Apple Inc y Dell Inc , para presentar la oferta. El fabricante de productos de memoria Kingston Technology y la firma de almacenamiento de datos Seagate Technology Plc también integran el grupo.
La decisión de vender el segundo productor más grande del mundo de chips de memoria Flash, informada por primera vez por Reuters, se tomó en una reunión del directorio realizada el miércoles. A última hora del martes, fuentes dijeron que Toshiba se estaba inclinando por vender su negocio a su socio estadounidense Western Digital.
Las memorias NAND que fabrica Toshiba están en el almacenamiento interno de múltiples dispositivos, incluyendo el iPhone y otros smartphones.
Aún no está claro si la decisión del directorio de Toshiba implicará que la operación se lleve a cabo sin problemas, ya que Western Digital inició acciones legales tras argumentar que no se puede llegar a un acuerdo sin su consentimiento, debido a su posición como socio del grupo japonés.
Sin embargo, Toshiba dijo estar seguro de que el acuerdo resistirá los desafíos legales planteados por Western Digital. Una portavoz de Western Digital dijo que la compañía no tenía comentarios inmediatos sobre el tema.
Toshiba, por su parte, destacó que la venta engrosará sus finanzas en 740.000 millones de yenes después de impuestos. Eso lo sacaría de un capital accionario negativo, un paso clave que pretende lograr en marzo para seguir cotizando en la bolsa de Tokio.